En el marco de la conmemoración del Día Mundial para la Prevención de Desastres, el acuerdo permitirá mejorar la respuesta en este tipo de emergencias.
En el Día Internacional para la Reducción de Desastres, el Alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, firmó el compromiso de colaborar como miembro del sistema de protección civil para contribuir a la gestión integral del riesgo de desastres y fortalecer capacidades de preparación, respuesta y recuperación.,
“Esta firma de compromiso -dijo el Jefe Comunal- que podría parecer un hecho simbólico, revela nuestro interés genuino en reducir los riesgos en caso de desastres causados por la naturaleza o por mano del hombre”.
“Chile no sólo es un país de terremotos. Teníamos la idea que cada 25 años había un terremoto pero en los últimos tiempos hemos visto que eventos de la naturaleza han azotado nuestras costas y ciudades cada dos años. Y en nuestra comuna tenemos dos emergencias por incendio cada semana. Por ello, la capacitación es fundamental”, concluyó Felipe Alessandri.
A su vez, la subdirectora de Protección Civil y Emergencia del municipio, Ana Luisa Yáñez, destacó que “para proteger a las personas, necesitamos prepararlas para que tengan una mejor respuesta frente a los riesgos. Cuando ocurre una emergencia mayor es necesario preparar a la comunidad para que reaccione en forma adecuada, antes de la llegada de Bomberos, ambulancias, etc. Las personas deben tener un plan de emergencia preparado en su casa y en el trabajo”.
En el marco de la conmemoración, en el Salón de Honor de la Municipalidad de Santiago, se desarrolló el Seminario Gestión del Riesgo Urbano, en el que participaron -entre otras instituciones- la ONEMI, el Cuerpo de Bomberos, la Sub Dirección de Protección Civil y Emergencia del municipio, la Universidad Bernardo O´Higgins y las empresas Enel, Metrogas y Aguas Andinas.
La conmemoración del Día Internacional para la Reducción de Desastres (DIRD) comenzó en 1989. Ese año, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó su celebración, al considerar que representa una forma de promover una cultura global sobre la reducción del riesgo de desastres, lo que incluye su prevención y mitigación.