El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, visitó el sector del Colegio Santa María, ubicado en Santa Rosa 629, en el Barrio Matta Norte, para analizar los problemas de seguridad que afectan a la comunidad escolar y vecinal. Durante la visita, se reunió con el sostenedor Luis Ramírez, el director Wilfredo Burgo y representantes de los centros de padres y alumnos, con el objetivo de buscar soluciones concretas para garantizar un entorno más seguro.
Uno de los principales temas abordados durante el encuentro fue la presencia de rucos, viviendas improvisadas en espacios públicos que se han convertido en focos de inseguridad, microtráfico y molestias para los vecinos. La Municipalidad realiza diariamente operativos de retiro de estos rucos, aunque el alcalde Desbordes reconoció que la situación es compleja: “Estamos retirando rucos todos los días, pero resulta que a la media hora están repuestos. Es una situación crítica que requiere soluciones estructurales”, explicó la autoridad comunal.
Además, se abordaron diversas estrategias complementarias para mejorar la seguridad, incluyendo el reforzamiento de la presencia de Seguridad Municipal, la instalación de cámaras de vigilancia y la coordinación con el colegio y vecinos. “La seguridad de la comuna se ha duplicado, pero no es suficiente todavía. Vamos a tener a fin de mes un vehículo de seguridad por cada barrio circulando constantemente 24 horas al día”, señaló el jefe comunal.
El alcalde también enfatizó la necesidad de atender la situación de personas en situación de calle que, en algunos casos, participan en actividades delictivas: “La enorme mayoría de las personas que sí son de situación calle no tienen ni una intención de moverse. Se quedan ahí instalado. Muchos de ellos les hemos ofrecido trabajo y no quieren salir”, indicó.
En cuanto a los espacios públicos cercanos al colegio, se proyecta cerrar la plaza durante la noche para evitar que los rucos y personas vinculadas al microtráfico vuelvan a instalarse, mientras se mantiene abierta durante el día para la comunidad. También se planifica reforzar la iluminación y ampliar la vigilancia con cámaras de televigilancia.
“Tenemos que hacer un trabajo conjunto entre municipalidad, colegios, vecinos y la policía. Solo así podremos mejorar la seguridad en la comuna y garantizar que nuestros estudiantes y familias puedan vivir y estudiar tranquilos”, afirmó el alcalde Mario Desbordes.