La Municipalidad de Santiago junto con la Embajada de España realizaron una colocación de ofrendas florales frente al monumento a Cristóbal Colón ubicado en el Parque Forestal durante la mañana del viernes 10.
“El arribo de Colón no solo representó el descubrimiento de América, sino que también, y especialmente parados aquí en Chile, representa el momento en que los mejicas, los toltecas, los mayas, los incas, los mapuches, los aymaras, los guaraníes, precolombinos todos, descubrieron a los españoles y a los europeos. Nuestros habitantes primigenios con los que mantenemos grandes deudas pendientes hasta el día de hoy también descubrieron un mundo nuevo. Españoles y chilenos hemos forjado una relación a través del intercambio cultural, social y político. Luego de regímenes brutales que han marcado un mapa común entre las dos naciones, sin duda el de 1939 con la llegada del Winnipeg, con 2000 españoles republicanos obligados a emigrar a otras tierras luego del triunfo de Francisco Franco. Nombres como José Balmes, Roser Bru, Mauricio Amster, José Ricardo Morales, Leopoldo Castedo, todos aportaron con arte y cultura. Cuando uno recorre el mapa demográfico de la comuna de Santiago, ve que entre las nuevas comunidades está la de los nuevos inmigrantes españoles que continúan llegando a nuestro país. Heredamos el idioma, una gran influencia cultural y la religión, y eso es parte de una suerte de sincretismo que define al Chile de hoy, a la Latinomérica de hoy, tal como lo define la cultura de nuestros pueblos originarios, sus costumbres y creencias. Esta mezcla cultural tan antigua nos permite, hasta el día de hoy, jugar a creer tal como lo hacían los aztecas en aquellos tiempos de Colón, pensando que un conejo puede vivir en el ombligo de la luna” expresó la alcaldesa Carolina Tohá durante la tradicional ceremonia.
Como parte de la conmemoración que marca el nacimiento de una nueva identidad producto del encuentro y fusión de los pueblos originarios del continente americano y los colonizadores españoles, luego de los 72 días de navegación en los que Rodrigo de Triana avistó Tierra y casi por azar descubrieron que se trataba de un nuevo continente que esta fecha, el “Día de la Raza”, establecida por decreto el 16 de agosto de 1923 en Chile, es una festividad que también se celebra en el resto del continente.
En la ceremonia también participaron diversas instituciones españolas y la comunidad española residente en el país.