La Alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, manifestó su molestia por la forma en que se procedió a la clausura y desalojo anticipado del tradicional restaurante San Remo del Barrio Matta, con el objetivo de iniciar faenas de construcción de la nueva Línea 3 del Metro, calificando como de “violencia totalmente gratuita” la forma en que se procedió con el cierre del establecimiento.
La medida se tomó durante este mediodía con presencia de Carabineros, pese a que el compromiso con los locatarios era concretar su traslado durante este fin de semana. Por ello, la máxima autoridad comunal llegó hasta el local a solidarizar con los trabajadores y administradores del emblemático recinto, acompañada del Comité Matta Sur y del empresario gastronómico Marcelo Cicali, quien lideró un movimiento para evitar el cierre del local.
|
“La manera en que hoy se procedió transgrede lo que es el deber del Estado, que es proteger a la gente, de tratarla con respeto”, manifestó la Alcaldesa, agregando que “aquí se actuó con una violencia totalmente gratuita. Los administradores ya había aceptado irse en las próximas 48 horas, y a pesar de eso se prefirió sacarlos a la fuerza con carabineros y además obligarlos, en estos días, a llevar todos sus bienes a una bodega, con el potencial deterioro que ello implica”.
Carolina Tohá insistió en que “el Estado está para servir a las personas y no para ponerle el pie encima. Como municipio le hemos planteado ya un reclamo al Metro, y vamos a ir a hablar con ellos en los próximos días, porque si esta es la manera en que se van a construir las nuevas líneas de Metro, no lo podemos aceptar. Este es un servicio muy importante, pero eso no quiere decir que podemos atropellar los derechos de los ciudadanos, y por eso, con mucha claridad, le haremos saber a sus directivos que no vamos a aceptar este trato a los vecinos y vecinas de Santiago”.
La Alcaldesa de Santiago señaló que si bien hay un mandato judicial, no había nada de ilegal en esperar un par de días para concretar un traslado ordenado y sin estas características. “Si ellos hubieran llamado por teléfono ayer para avisarles a los dueños del San Remo o avisarle al municipio, hubiésemos encontrado una vía alternativa; pero no, prefirieron llegar acá de sorpresa a desalojar, dándoles 4 horas y haciéndoles perder la inversión para funcionar. Esa es la manera en que el Estado no debe funcionar”, concluyó.