Los 22 vendedores de carteras y bolsos podrán acceder a permisos provisorios mensuales para continuar con su giro en su actual ubicación. La Municipalidad de Santiago fijó un plazo hasta el 31 de marzo para concluir con la habilitación de los nuevos locales.
La mesa técnica organizada por la Municipalidad de Santiago, con representantes de los 22 comerciantes del Portal Bulnes, para definir el traslado de estos últimos a un nuevo lugar, llegó finalmente a un buen término. Ayer se acordó unánimemente la habilitación de nuevos locales en el pasaje Irene Ariztía en calle San Antonio.
La nueva locación se encuentra a media cuadra de la Plaza de Armas y en medio de galerías comerciales, lo que garantiza un buen flujo de público. El municipio asumirá los costos de habilitación de los stands y apoyará en la gestión comercial, a través de la Dirección de Desarrollo Económico Local, así como también colaborará en la difusión de la nueva ubicación de los comerciantes.
En este intertanto, los permisos provisorios que vencían mañana sábado serán renovados mensualmente por los próximos tres meses, para que los locatarios puedan seguir utilizando el Portal Bulnes para la venta de sus productos. En todo caso, el plazo impuesto por el municipio es el 31 de marzo para concretar el traslado, fecha que dependerá de que las obras de habilitación hayan concluido efectivamente.
Cabe señalar que la Municipalidad de Santiago notificó hace más de tres meses que los permisos precarios en dicho lugar no serían renovados por el 2014, debido a que el Portal Bulnes se integra al proyecto de mejoramiento de la Plaza de Armas, decisión administrativa fue respaldada por un fallo unánime de la Corte de Apelaciones, que validó las facultades del municipio en esta materia.
PLAZA DE ARMAS
Respecto del proyecto de mejoramiento de la Plaza de Armas, uno de los elementos considerados una vez concluidas las obras es el reordenamiento en su uso, lo que implica un mejoramiento del mobiliario de pintores y ajedrecistas, y el potenciamiento de actividades culturales y familiares.
Otros ocupantes habituales de este espacio en los últimos años han sido los tarotistas, quienes ofrecen sus servicios informalmente, pues no cuentan con permiso -no lo han solicitado a la actual administración- ni pagan derechos municipales para ejercer esta labor.
Previo al inicio de las obras, a todos los usuarios -pintores, ajedrecistas y tarotistas- se les informó de las nuevas condiciones mientras duren los trabajos de remodelación. En el caso de las personas que leen las cartas, se les ofreció regularizar su situación, darles un permiso formal y reubicarlos en un nuevo sector, para no generar saturación en la plaza restaurada.