La Municipalidad de Santiago celebró el Día Mundial del Medio Ambiente destacando el pionero programa desarrollo sustentable de la Escuela Diferencial Juan Sandoval Carrasco, establecimiento que desde el año 2008 incorpora dentro de su proceso formativo la temática ambiental de manera transversal.
El Alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett destacó que «a través del desarrollo de iniciativas novedosas y con el apoyo municipal, integran activamente a alumnos, apoderados, profesores y directivos en la protección del medioambiente, convirtiéndose en un ejemplo para el país en esta materia».
Una cocina y colectores solares de 125 litros, un secador de fruta, huertos urbanos colgantes confeccionados con productos reciclados, un invernadero, una estación de compostaje, «salas verdes» y puntos limpios, entre otras acciones propiciadas por la propia comunidad educativa, son algunas de los ejemplares proyectos que la Escuela de Educación Especial «Juan Sandoval Carrasco» presentó en una feria al interior del colegio durante esta jornada de conmemoración.
La Escuela, fundada en 1974, tiene una matrícula de 236 estudiantes y se caracteriza por recibir a alumnos y alumnas desde recién nacidos hasta jóvenes de 26 años, en los niveles Pre-Básico, Básico y Laboral.
El establecimiento es una de las pocas escuelas de educación especial en Chile que han ingresado al Sistema Nacional de Certificación Ambiental de Establecimientos Educacionales (SNCAE), impulsado por el Ministerio de Medio Ambiente y es la única que ha obtenido Certificación en Nivel de Excelencia (2010), manteniendo dicha categoría hasta hoy día, lo que demuestra el intenso trabajo ambiental que efectúan sus directivos, profesores y comunidad en general.
Otra de las acciones que lleva a cabo el colegio en esta área es el programa de reciclaje de papel y cartón con el que se apoya a instituciones de beneficencia, incorporando otros materiales como plásticos y tetra pack. También se realiza la recuperación de residuos orgánicos generados en la alimentación de los alumnos para producir compost -un fertilizante y mejorador de suelo natural- que utilizan luego en su invernadero y huertos colgantes, que han logrado construir con esfuerzo y gran imaginación, ocupando para ello, materiales recuperados.
Además, incorpora a toda su comunidad educativa en este proceso, para lo cual ha constituido una Comisión de Desarrollo Sustentable, que actúa como otro programa al interior del establecimiento, permitiendo que la temática sea parte de la malla curricular de los niños y que los padres estén incorporados en este proceso.
Tanto niños como padres han sido capacitados en diferentes temas ambientales, entre ellos, talleres de ollas brujas, talleres de agricultura ecológica y de reciclaje de bolsas plásticas. Estos cursos también buscan que los jóvenes puedan tener una opción laboral, aprendiendo técnicas tales como el desensamblaje y clasificación de material de artículos electrónicos y computacionales para una importante empresa de reciclaje y manejo de residuos del país.
Para avanzar más en el empleo de energías no convencionales y en alianza con el Rotary Club Huelén, durante el segundo semestre, la escuela implementará un sistema de calefacción central solar, mejorando el bienestar de los niños.