• Alcaldesa Carolina Tohá reiteró necesidad de que exista una política de Estado que promueva la conservación de inmuebles históricos no sólo en la capital, sino que en el resto del país.
• Emergencia obligó a evacuar cerca de 300 escolares de un colegio municipal, ubicado a un costado de la casa siniestrada, quienes recientemente habían sido capacitados en un Plan Integral de Seguridad Escolar.
La alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, expresó su preocupación por la seguidilla de incendios que ha ocurrido en los últimos meses en la comuna, afectando básicamente a inmuebles históricos, tras acudir esta tarde a un siniestro que se habría originado por un desperfecto eléctrico y que afectó a una vivienda del Barrio Yungay, que data del siglo XIX.
La emergencia obligó a evacuar de inmediato a cerca de 300 alumnos de educación básica que a esa hora asistían a clases en la escuela municipal República de Israel, colindante a la casa afectada, y que gracias al actuar de su director, Miguel Arce, y del personal docente y paradocente, se pudo realizar una salida ordenada de los estudiantes, quienes hace sólo un par de semanas habían hecho un simulacro en el marco del Plan Integral de Seguridad Escolar.
“Afortunadamente se había hecho este ejercicio de evacuación hace pocos días, por lo que los niños nunca estuvieron en peligro. Sin embargo, quedo con una alarma profunda, porque vemos permanentemente estos incendios, no sólo porque hay una amenaza a la vida de personas, sino también porque se pierde un valioso legado patrimonial”, dijo la alcaldesa Tohá.
“Esta situación nos demuestra la vulnerabilidad de estos barrios antiguos y a la vez nos refuerza la necesidad de que exista una política de Estado para recuperarlos, para tomar medidas de prevención y cuidar la vida de las personas y el patrimonio de todos los chilenos”, recalcó la jefa comunal.
La autoridad edilicia calculó que en los últimos dos meses se ha registrado a lo menos 10 incendios en distintos puntos de la comuna, argumentando que las causas más probables de estas emergencias se deben a que se trata de construcciones muy antiguas, con materiales altamente inflamables como madera y adobe, que no cuentan con sistemas eléctricos adecuados ni cortafuegos que eviten que las llamas se propaguen a viviendas colindantes.
“Reiteramos nuestro llamado a que generemos una política de defensa de estos barrios patrimoniales. Como Municipalidad estamos trabajando con Bomberos en un plan de prevención que queremos instalar para poder bajar estos índices, pero necesitamos ayuda de políticas nacionales, porque aquí hay que hacer inversiones especiales de prevención y reparación de los sistemas eléctricos de estas casas más antiguas, no sólo de Santiago, sino también del resto del país”, recalcó Carolina Tohá.
Tanto los equipos de Emergencia como de Desarrollo Comunitario del municipio estuvieron trabajando en coordinación con bomberos, a fin de prestar una primera ayuda a los vecinos afectados –que totalizan 5 personas mayores de edad-, asegurar la presencia de los familiares de los escolares evacuados y evaluar los daños de las viviendas y el colegio. Este último, preliminarmente, tuvo sólo daños en las techumbres del casino y la cocina, por lo que permanecerá cerrado temporalmente.