El lugar donde se originó el siniestro no contaba con los permisos necesarios para funcionar como taller textil ni bodega. A través de la Dirección de Desarrollo Comunitario, se entregaron kits de emergencia y un subsidio de arriendo a las seis familias que resultaron damnificadas.
La Municipalidad de Santiago anunció que brindará ayuda a las seis familias que resultaron damnificadas tras el incendio que afectó a una bodega y a dos locales comerciales, en la intersección de calles Bascuñán Guerrero con Blanco Encalada.
Hasta el lugar, concurrió un equipo de la Municipalidad, liderado por el director de Desarrollo Comunitario, Guillermo Soto, para realizar un balance en terreno del número de personas afectadas y sus necesidades.
El directivo, junto con lamentar la tragedia y el fallecimiento de dos personas, dijo que “se dispuso de materiales básicos como colchones y frazadas, para que las personas puedan subsanar los primeros días de la tragedia. Además de entregarles subsidios de arrendamiento por un mes”.
Además detalló que el taller textil donde se inició el siniestro no contaba con permiso, ni autorización para su funcionamiento y que se están realizando todas las investigaciones para esclarecer los hechos. “Efectivamente era un local irregular, era una bodega, que además tenía destino habitacional, absolutamente irregular”, explicó.
Guillermo Soto también hizo “un llamado a los vecinos a denunciar. Santiago tiene más de 170 mil viviendas y como municipio podemos intervenir cuando hay denuncias. Por eso nuestro llamado es a los vecinos, dirigentes sociales, a que cuando vean alguna irregularidad concurran al municipio y denuncien”.