La acción busca proteger a la comunidad frente al uso indebido de cámaras no autorizadas, muchas de las cuales podrían haber sido utilizadas para alertar la presencia de equipos policiales o municipales.
La Dirección de Prevención y Seguridad Comunitaria de la Municipalidad de Santiago, en una acción coordinada con la Sección de Investigación Policial (SIP) de la 4ª Comisaría de Carabineros, realizaron un operativo de retiro de más de 10 cámaras de televigilancia que se encontraban instaladas de forma irregular en postes de alumbrado público y otros bienes nacionales de uso público en el eje Victoria y sus inmediaciones.
El procedimiento forma parte de un servicio preventivo que busca fiscalizar y controlar el uso legal del espacio público, dando respuesta a denuncias ciudadanas sobre la instalación de estos dispositivos sin la debida autorización municipal ni sectorial vigente.
Entre los puntos intervenidos se cuentan los sectores de Sierra Bella, San Isidro, Santa Rosa, Juan de Dios Vicuña, Cuevas y Placer, entre otros. Las cámaras retiradas fueron remitidas al 4º Juzgado de Policía Local de Santiago, conforme al procedimiento establecido por la autoridad competente.
El jefe de Operaciones de la Dirección de Prevención y Seguridad Municipal, Edgard Jofré, explicó que este tipo de operativos se desarrollan de manera permanente en la comuna, y que la instalación en espacio público es irregular bajo cualquier circunstancia, identificándose dos tipos de usos problemáticos.
En ese sentido, detalló: “Sabemos que esto puede tener dos lecturas, pero absolutamente ambas están fuera de norma. Hemos encontrado cámaras que, en algunos casos, están asociadas a otros procedimientos que hemos realizado con Carabineros y que tienen que ver con puntos de venta de droga o inmuebles ocupados. También hay casos en que las personas, sin conocer la normativa, extienden el halo de vigilancia hacia el espacio público, lo cual tampoco corresponde”.
Por eso, Jofre destacó el doble enfoque del procedimiento. «Estamos realizando dos labores, una labor educativa para las buenas personas, enseñándoles cómo deben realizar estos procesos, que se entienden, pero por otro lado también estamos atacando a aquellos que definitivamente la utilizan para cometer delitos.»
De esta forma, recordó que la normativa permite la instalación de cámaras en propiedades privadas, siempre que no vulneren el espacio público ni afecten la privacidad de terceros. “Siempre hay que utilizar el propio inmueble, hasta la línea de edificación. Eso no tiene inconveniente y se entiende que para las buenas personas es una herramienta útil, pero también depende de quién la utilice, porque hay quienes las instalan para alertar la llegada de la policía o de los equipos municipales cuando se están cometiendo incivilidades o delitos de baja complejidad”, puntualizó.
El operativo se desarrolló sin incidentes, y las cámaras retiradas fueron puestas a disposición del 4º Juzgado de Policía Local de Santiago, mediante oficio formal remitido por la 4ª Comisaría de Carabineros.