La alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, a través de la oficina de Medio Ambiente de la Subdirección de Planificación y Sustentabilidad, hizo entrega oficial del primer kit de composteras y vermicomposteras a vecinas y vecinos, inscritos y capacitados, del condominio Las Carabelas, cercano al barrio San Borja.
Esta comunidad cuenta con 228 departamentos, y son alrededor de 500 las personas que residen en él, quienes se comprometieron a gestionar de manera responsable, sus residuos orgánicos domiciliarios. En total se entregaron 15 vermicomposteras y 2 composteras y sus respectivos equipamientos.
“En el día mundial del medio Ambiente, estamos en esta comunidad porque generó conciencia sobre el cuidado que se debe tener para no seguir contaminando nuestro planeta, adoptando medidas desde lo local, a fin de generar un aprendizaje para reducir el exceso de basura que cada día sacamos desde nuestras casas y departamentos”, dijo Hassler.
Añadió que la intención del municipio con el nuevo modelo de gestión de residuos, es mitigar la emergencia climática y avanzar en la estrategia residuo 0, que tiene como meta reducir un 15% los residuos mediante recuperación y/ reciclaje: 3.755 toneladas por año.
Por su parte la administradora del condominio Las Carabelas, Larrisa Veas, valoró la iniciativa ambiental y señaló que reducción de la basura es un desafío fundamental.
“Queremos que las familias reduzcan sus residuos, que en vez de sacar dos o tres bolsas de basura diariamente, podamos reducirlas a sólo una”, señaló la vecina.
Entre las recomendaciones técnicas para el buen manejo del equipamiento están, por ejemplo, instalar los sistemas en un lugar fresco y no tan soleado, mantener siempre la humectación, mover con un bastón cada día los residuos, airear los compostajes, depositar sólo materiales orgánicos, vegetales y frutas crudas, evitar alimentos cítricos, ácidos y todo tipo de comida procesada y carnes.
Esta será la instancia para manejar la materia orgánica, con el debido acompañamiento de la municipalidad, a través de la oficina de medio ambiente y sus monitores, a fin de generar un aprendizaje para reducir el exceso de basura que cada día sacamos desde nuestras casas y departamentos.
La Comuna de Santiago, genera del orden de 170.000 toneladas de desechos domiciliarios anualmente, de los cuales la mitad de ellos son residuos orgánicos y en su gran mayoría, van a rellenos sanitarios, sin ningún tipo de uso alternativo, que permita generar beneficios ambientales, como es la transformación para el mejoramiento de suelos y abonos, para ser reutilizados en la comuna en parques, huertos comunitarios y por, sobre todo, para uso domiciliario.