• Carolina Tohá anunció que se iniciará el claustro, y que además se creará un Departamento de Asuntos Estudiantiles y Convivencia, una Unidad de Control de Gestión y se realizarán cambios en el Centro de Padres del establecimiento.
• Participaron en esta reunión los alumnos, profesores, representantes de los dos centros de padres, la Dirección de Educación Municipal y la alcaldesa.
En la mañana de hoy la alcaldesa de Santiago Carolina Tohá sostuvo la primera reunión de la Mesa de Trabajo, anunciada la semana pasada, en la que participaron alumnos, docentes y apoderados de los dos centros de padres del Instituto Nacional.
Al término del encuentro la edil señaló que “esto va a ser un camino, hay un gran trabajo que hacer porque este es un establecimiento que ha estado por años conflictuado”, y precisó que hay problemas sin solución que se han acumulado en el tiempo. “Tengo la convicción de que en el Instituto Nacional hay piso para hacer reformas muy importantes. Si bien hay distintas visiones concordamos entre varios actores que podemos avanzar en varias de ellas. Una de ellas es que hay que actualizar el proyecto educativo, un proceso que se inició y al que no se llegó a puerto, por eso hay que hacerlo con todos los actores”.
Anuncios a corto plazo
La máxima autoridad comunal anunció que este martes es el plazo para recibir las distintas propuestas para ver qué entienden por Claustro. Agregó que este jueves 13 habrá una nueva reunión de la Mesa de Trabajo donde espera acordar un método de claustro que interprete a todos los actores y su calendario, para así iniciarlo lo antes posible.
El segundo anuncio es la reforma del modelo de dirección que tiene el Instituto Nacional: se creará un Departamento de Asuntos Estudiantiles y Convivencia que asuma los problemas de relacionamiento que hay al interior del recinto, como también una Unidad de Control de Gestión Interna que dé garantías sobre el buen uso de los recursos, dé transparencia y vele por el buen funcionamiento, lo que debe ser una buena práctica y parte del funcionamiento habitual del establecimiento.
La alcaldesa Tohá también dijo que se fortalecerá el Consejo Escolar que es equivalente al consejo universitario, que ahora tiene decisiones resolutivas. Asimismo, se harán cambios en el Centro de Padres para que nadie quede excluido. “Hoy el que no paga no puede participar en la decisión de los directivos y eso no es aceptable ni es correcto; hoy hubo buen ánimo para avanzar en esa respuesta. Hay un buen piso para hacer una reforma y enfrentar el bicentenario del Instituto Nacional”, expresó la edil.
Deficiencias históricas
La complejidad del Instituto Nacional radica en que tiene una comunidad muy vasta y diversa de 4.400 personas, cuyo modelo de gestión no tiene resueltos diversos temas. Por ejemplo, hay un solo psicólogo para toda la comunidad y no existe un área específica de la Dirección dedicada a ver los temas de convivencia de los estudiantes. Ante ese escenario las autoridades, que además tienen muchas tantas tareas, “simplemente se ven desbordadas”, opinó la edil.
Otro problema es el de la infraestructura y la carencia de recursos, como sucede con todos los establecimientos públicos de Chile. La alcaldesa señaló que aquí se ha buscado el aporte de privados, de los apoderados y eso tensiona porque no todos pueden aportar. Además no todos están de acuerdo con la manera en que esos recursos se levantan o cómo se administran posteriormente. “Esto se debería evitar con un sistema de financiamiento que evite que los colegios estén buscando recursos en otros lados”, puntualizó.
“Hay problemas de infraestructura que son realmente inaceptables. En Santiago la mitad de los colegios está fuera de la jornada escolar completa porque el suelo es muy caro y eso significa que las grandes inversiones que se hicieron en colegios en las décadas del 90 y 2000 en Santiago no se han hecho o fueron muy tardías con motivo del terremoto. En el caso del Instituto Nacional si uno hace el cálculo de los que se ha invertido en infraestructura considerando la cantidad de alumnos, está por debajo del promedio nacional de los colegios que están en Jornada Escolar Completa. Eso ha acumulado una tensión en los estudiantes de calidad de los espacios, de hacinamiento, de lugares que están inutilizables”, reconoció la alcaldesa.
En relación al tema de la remoción del rector, la alcaldesa precisó que “en el Instituto hay temas más de fondo que hay que resolver en primer lugar”. Es crítico el proceso institucional en el que no se han puesto de acuerdo hace años -reiteró- y ese punto “no lo va a resolver ninguna autoridad por más que la cambiemos. Ninguna, sea la que sea, va resolver por sí sola la falta de espacio de participación y el fortalecimiento de todas las instancias para que puedan resolver sus conflictos”, recalcó.
Los alumnos no plantearon como parte del petitorio la petición de renuncia del rector, informó la alcaldesa, sino que “se evalúe la Dirección del establecimiento a la luz de los nuevos proyectos que se van a establecer” y en ese sentido advirtió que es obligación del Municipio en todos los establecimientos una permanente evaluación de sus directores
“Nuestra opinión es que hoy en Santiago están dadas las instancias para que se expresen estudiantes, apoderados o profesores: a través de los claustros”. Por último, la alcaldesa Tohá reiteró que “la disposición de este sostenedor es hacer cambios en la educación pública de Santiago, pero para eso no es necesario que se nos planteen tomas”.
A su juicio, los desalojos que se realizaron en la administración anterior solo perpetuaron los problemas en los colegios, que siguieron con sus mismas agendas de demandas. “Nosotros vamos a trabajar arduamente para seguir solucionando estas situaciones. Nuestra apuesta es continuar con el diálogo, no es necesario hacer tomas porque este canal está completamente disponible”, concluyó.