Esta mañana, el Subdirector de Servicio Social del Municipio de Santiago, Felipe Barría, y el jefe del Departamento de Inspección de la Superintendencia de Electricidad y Combustible (SEC), Mariano Corral, junto a profesionales de ambas entidades, realizaron una nueva inspección al inmueble ubicado en calle General Mackenna esquina Gabriel de Avilés.
Luego del recorrido del edificio, Mariano Corral, Jefe Departamento Técnico Inspección de Electricidad SEC, fue enfático en señalar los riesgos al que están expuestos los habitantes del lugar: “en la inspección que realizamos nos encontramos con un empalme adulterado, con conexiones irregulares entre departamentos, con circuitos de enchufes sin protección diferencial y con circuitos sin protecciones que genera un peligro de incendio. Existen edificios antiguos, pero su mantenimiento eléctrico debe ser acorde, por lo tanto acá hay un inmueble dejado al olvido por sus propietarios, quiénes no se han hecho cargo de lo que exige la ley. Existe riesgo de electrocución de los residentes y de incendio por el recalentamiento de cables. Es una situación grave para las personas que viven acá y por eso junto a la municipalidad hemos iniciado las acciones para cortar el suministro de este edificio para proteger a las personas”.
Por su parte, Felipe Barría, Director Servicios Sociales de la Municipalidad de Santiago, quien confirmó sobre la imposibilidad de habitar dicho inmueble y la preocupación de la actual administración de Santiago por quienes ahí residen. .ichol inmueble. s palabras de , realizaron una nueva visita al ara que la traspasen a quienes hablen con la prensa. “El día 4 de marzo se notificó sobre la inhabitabilidad del edificio. Se dio un plazo de dos meses para la reubicación de los residentes. La mayoría son arrendatarios, por lo que vamos a colaborar activamente con ellos con la finalidad de que tengan mejores condiciones de vida que las que actualmente tienen”, expresó Barría.
Cabe recordar que esta semana, luego de denuncias de vecinos y locatarios, de diversas fiscalizaciones de la Subdirección de Servicio Social, de la SEC y de la Dirección de Obras Municipales, se decidió decretar la inhabilidad del edificio, que requiere de una reparación estructural, incluyendo las fachadas, redes de gas, electricidad y agua. Las mencionadas inspecciones concluyen que el edificio no cumple con las debidas garantías de salubridad, habitabilidad y seguridad, constituyendo un riesgo para la vida de las personas que lo habitan.
Sus habitantes tienen dos meses para presentar proyectos de mejoras o para reubicarse. Para lo cual, el Municipio de Santiago los apoyará con un subsidio con el objeto de que puedan trasladarse hasta lugares donde puedan tener mejor calidad de vida.
El subdirector de Servicio Social del Municipio, explicó que “esta medida se toma por condiciones complejas, precarias desde el punto de vista de la red eléctrica, también por hacinamiento y porque algunas de las unidades habitacionales también se usan para bodegaje y con materiales combustibles, peligrosos, a lo que se suma el deterioro de la fachada del edificio”. Y agregó, que “el Municipio de Santiago tiene la obligación de velar por la seguridad de los vecinos. Acá viven alrededor de 220 personas catastradas y de ellos, 51 son niños, en 27 unidades habitacionales. Y, por lo tanto, para resguardar su seguridad, mientras no presenten proyectos de reparación, el edificio estará inhabilitado”, concluyó.