Edificio “San Francisco” beneficia a 48 familias de la comuna, a través de un proyecto que rescata el diseño de los antiguos cités de barrio.
Con la inauguración del conjunto habitacional «San Francisco» se marcaron dos hitos en Santiago. El primero, y quizá más importante, es que se rompió una racha de 16 años sin que se construyeran viviendas sociales en la comuna, ya que el último de estos proyectos data de 1998. Lo segundo relevante es su diseño arquitectónico, que replica a los antiguos cités de la capital, lo que permite rescatar la identidad barrial.
Ambos aspectos fueron destacados por la alcaldesa Carolina Tohá, durante la inauguración de este condominio social, actividad que contó con la presencia del ministro del ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez, ocasión en que también destacó el esfuerzo del municipio, que a través de la Corporación de Desarrollo (Cordesan) pudo adquirir los terrenos para el proyecto, a tres cuadras del Barrio Franklin y cercano a colegios y locomoción colectiva.
“Fueron largos años de espera para que los vecinos de Santiago finalmente pudieran acceder a su casa propia. Y esto se debe a que las políticas habitacionales y el costo del suelo en la comuna hacen muy difícil construir viviendas sociales acá. Este proyecto se logró gracias a que se conjugaron varios factores, que son estos aportes extraordinarios de Ministerio para reconstrucción, más la voluntad del municipio, que a través de la Cordesan donó los terrenos”, explicó la edil.
También destacó el esfuerzo de los vecinos, que desde el 2007 se venían organizando en un comité para postular a los fondos del MINVU.
Se trata de 48 departamentos dúplex, 2 de ellos con acceso especial para discapacitados, cada uno con tres dormitorios, baño, cocina, sala de estar –comedor y logia, y que en promedio tienen una superficie de 65,52 metros cuadrados. La inversión fue $1.152 millones entre el MINVU, Municipalidad y el aporte de los vecinos.