“Desarrollo Urbano: ¿Densificación o extensión?”, llevó por nombre el panel en donde la Alcaldesa de Santiago participó con sus símiles de Recoleta y Colina, durante esta mañana en Seminario de Actualidad Inmobiliaria.
Santiago no sólo es el centro político de la ciudad y capital del país, sino que también es un centro histórico comercial dinámico y en permanente desarrollo que durante los últimos diez años ha vivido transformaciones y se ha sabido reinventar a raíz del fuerte fenómeno de densificación que se llevó a cabo.
Respecto a ese fenómeno y del nuevo rol que debiera tener la industria inmobiliaria en el diálogo con ese nuevo escenario en la ciudad y en la comuna en particular, se refirió la Alcaldesa Tohá en un foro donde participó además el Alcalde de Recoleta, Daniel Jadue y la primera autoridad de Colina, Mario Olavarría, dentro del Seminario de Actualidad Inmobiliaria “¿Territorio Urbano Congelado?”, que se llevó a cabo durante esta mañana en el Centro CorpArtes.
Parte de las ideas que expuso la alcaldesa Tohá, giraron en torno a que “Santiago no está congelado, Santiago está más dinámico que nunca y atrae mucha inversión pública y privada. Lo que buscamos es un desarrollo urbano equilibrado y sostenible en el corto, mediano y largo plazo. Tasas de saturación excesivas matan su dinamismo y calidad y hacen peligrar su crecimiento racional y sustentable. La clave está en un equilibrio entre movilidad y diálogo con el espacio público; entre comercio de calidad y peatones; entre transporte público y política de estacionamientos adecuadas y también con automovilistas que se bajen de sus autos para usar nuestras ciclovías. Por cierto que también entre grandes puntos de atracción de servicios y una red interior de pequeños comercios».
Además, agregó que «Santiago también sabe de eso, eso es lo que hemos llevado a cabo con el Plan Centro, con la recuperación de las galerías, en la incorporación del turismo y sus circuitos, en la gestión y animación de la Plaza de Armas y con la eficacia de nuestros servicios de limpieza, solo por nombrar algunos factores”.
Durante su intervención, la Alcaldesa de Santiago plasmó un panorama actual de la comuna y un desafío para que las inmobiliarias se plantearan en este nuevo escenario, donde es necesario repensar la ciudad a partir de su densificación con responsabilidad y pensando en un desarrollo sostenible y equitativo.
Es así como la edil argumentó que “Santiago no puede eludir la responsabilidad de ponerle atajo a un crecimiento irresponsable y que va en contracorriente de la sostenibilidad. Las dinámicas de deterioro acelerado de la periferia que todos conocemos en las últimas décadas, encuentran paralelos en el futuro del centro de la ciudad, debido a proyectos inmobiliarios que no cuidan la convivencia con sus vecinos, colonizando manzanas –sin cuidar el suelo restante-, para desarrollarse armónicamente en el futuro. Esa es una estrategia depredadora que hay que atajar y que representa la peor cara de un mercado inmobiliario desleal con la ciudad. La industria inmobiliaria debe saber hacerse una autocrítica».