La Dirección de Seguridad Vecinal del municipio entregó registro de nuestras cámaras de tele-protección de los ataques sufridos esta mañana a las Iglesias Gratitud Nacional y San Francisco. Los responsables podrían arriesgar penas que van desde los 541 días a 3 años de presidio.
La Municipalidad de Santiago expresa su más absoluto repudio a los ataques vandálicos que sufrieron nuevamente las iglesias de la Gratitud Nacional y San Francisco, templos que son monumentos nacionales y por ende muy valiosos para el patrimonio de la comuna de Santiago y de Chile.
Ya se encuentra en manos de la Fiscalía el registro de nuestras cámaras de tele-protección de los ataques contra estos monumentos históricos, a fin de contribuir a la investigación que llevará a cabo el Ministerio Público.
Las grabaciones fueron registradas por la Dirección de Seguridad Vecinal e informamos que dicho material audiovisual -que podrá servir como medio de prueba- será proporcionado a los medios de comunicación una vez que el Ministerio Público lo autorice.
La alcaldesa, Carolina Tohá, fue enfática en señalar que “dañar los monumentos nacionales no es parte del derecho a manifestación. En Chile es un delito que está establecido en la Ley de Monumentos Nacionales, en el artículo 38 y que tiene una pena privativa de libertad que va de 541 días a 3 años. Las personas que hacen daño a los monumentos nacionales pueden ir presas y estamos decididos, como municipio, a ocupar las herramientas que hoy tenemos para encontrar a los responsables”.
Finalmente, la edil enfatizó que hoy el municipio “cuenta con una larga red de cámaras de seguridad que permite una calidad de imágenes que nunca habíamos tenido y ambos atentados están registrados y en base a esa información el municipio presentara querellas para que estas dos acciones se investiguen en profundidad y se establezcan los responsables.”